Lineas aereas

07.05.2012 18:12

 

 

Líneas Aéreas

 

Editorial lengua de Trapo - 1999

 

 

Si estamos o no ante el nacimiento de un nuevo "boom" de la literatura latinoamericana, sólo el tiempo será el encargado de dar cumplida respuesta a esta cuestión que, inevitablemente se plantea un avezado lector, a la vista de la monumental antología recogida y editada bajo el sugerente título de "Líneas aéreas", por una de las escasas editoriales independientes que aún quedan en este país. Cierto es, que el término de "boom", acuñado por José Donoso, y que abarca a autores tan singulares como lo últimos premios "Cervantes", si es que la singularidad es una de sus constantes, comienza a tener vigencia, según cuenta él mismo, a raíz de una fiesta en la Nochevieja de 1970 en la casa de Luis Goytisolo, fiesta en la que no podía faltar, como no, la inefable Carmen Balcells, la "madre de todas las agentes literarias. Y no menos cierto es, que dicha idea, aun naciendo de una forma un tanto abstracta, y acaso anárquica, tuvo una rápida aceptación por la existencia precisamente de un substrato literario acorde con la misma, lo que de algún modo propició la internacionalización del concepto.

Muchos han sido los estudios desarrollados sobre el "boom", y bien es sabido que en su momento produjo un efecto curioso: en palabras de uno de los antológicos en "Líneas aéreas", "después de él era muy difícil escribir mejor". Dicho efecto mediático, lejos de incentivar a las nuevas generaciones, generó en ellos una cierta sensación de inmovilidad y desasosiego, sensación alentada en gran parte por el fervoroso público europeo, que constantemente demandaba nuevas obras a los García Márquez, Carlos Fuentes, Manuel Puig, Cortázar o Vargas Llosa.

Pero, treinta años después de la publicación de la monumental Cien años de soledad, ¿qué escriben sus herederos en aquellas tierras?. Y esa, y no otra, por mucho que se empeñen los más conspicuos críticos literarios de este país, es lo que nos viene a contar "Líneas aéreas", libro que algún día será considerado de culto, (no en vano posiblemente sea lanzamiento literario de algunos de sus autores), y que viene a llenar un vacío que se comenzó a gestarse tres décadas atrás, cuando el general Aureliano Buendía se encontraba ante el pelotón de fusilamiento. Lejos del "realismo mágico" de sus mayores, de Macondo, de Cómala y de tantos y tantos entrañables espacios, ofreciendo nuevas visiones de un mundo más acorde con los cambios que les han tocado vivir, aunque no por ello ajenos al devenir histórico, social y político de sus propios países, "Líneas Aéreas" viene a llenar un vacío que se nos antojaba casi mítico, y viene a confirmar que el Cono Sur siempre, por mucho que nos empeñemos en lo contrario, será fuente inagotable de recursos estilísticos. Vaya por ello mi respeto para la Editorial ante la larga nómina de autores, de la que me siento heredero como lector, y en la obligación moral de no nombrar a ninguno. Porque como casi siempre ocurre, correríamos el riesgo de dejarnos algún escritor en el tintero, bien por olvido, bien por alguna mala jugada del subconsciente. Y eso, sería más de lo que podría soportar.